En América Latina estamos siendo como conejillos de Indias... Europa lo tiene regulado, la mayoría de los países etiquetan... Brasil también etiqueta y Perú ya tiene más del 50% de su territorio decretado como "Zona libre de transgénicos".
Uruguay le da la espalda al problema y sigue promoviendo los cultivos transgénicos a espaldas de la población e incluso firma acuerdos con Monsanto, la multinacional líder en el mercado de semillas transgénicas y de agrotóxicos, cuyo historial cuenta con varios desastres ambientales, como el glifosato (Round Up Ready es su nombre comercial) que se demostró que atraviesa la barrera placentaria en mujeres embarazadas provocando malformaciones y leucemia en niños... E imperdonables juicios a campesinos de todo el mundo, y que en países como India ha tenido como causa el suicidio en masa de la comunidad campesina.
Se denuncian las redes de corrupción y de poder que existen aquí mismo en los despachos de los políticos del Uruguay, a punto tal de que los científicos de la Comisión que aprueba o rechaza los nuevos eventos transgénicos en Uruguay, está considerando presentar la renuncia en masa dado que sus investigaciones y sus conclusiones no se tienen en cuenta por el poder político. "Cuando entra un nuevo transgénico al Uruguay, nosotros ya sabemos cómo termina. Podrá demorar unos días más pero siempre se termina aprobando".
Mientras buena parte de la sociedad se mantiene desinformada al respecto porque los grandes medios no hablan del tema, lo cierto es que no se está reclamando lo que es propio y establecido incluso por ley, la 17.250 de "Defensa del consumidor" establece el derecho a saber y a estar debidamente informado acerca de lo qué se está consumiendo. Una ley que a la luz de los hechos, no se está cumpliendo en Uruguay.
fuente: delagro.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario